Los adoptados sí tienen derecho a saber su origen

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La Administración guarda todos los datos desde diciembre

PÚBLICO.ES - Madrid - 24/03/2008 20:14
El deseo de diversas asociaciones de adoptados es ya una realidad: podrán conocer a sus progenitores. Según la Ley de Adopción Internacional, las personas adoptadas tienen derecho a saber los datos sobre su origen de que dispongan las entidades públicas españolas. Los podrán solicitar al cumplir la mayoría de edad o, siendo menores de dieciocho años, mediante la representación de sus padres.
Así, las administraciones están obligadas a conservar la información que posean sobre los orígenes del menor. Los datos relativos a la identidad de sus padres, la historia médica del menor y la de sus familiares biológicos son los datos que tendrán que guardar.
Asesoramiento y mediación
"Las entidades colaboradoras que hubieran intermediado en la adopción deberán informar a las entidades públicas de los datos de que dispongan sobre los orígenes del menor", según recoge la norma, aprobada en diciembre del año pasado. Para ello, los adoptados contarán con asesoramiento, ayuda y mediación de los servicios especializados de la institución pública de Protección de Menores u otras organizaciones autorizadas.
Este derecho, recogido para las adopciones internacionales, se extiende en la nueva ley a los adoptados nacionales, mediante la adición de un artículo nuevo en el Código Civil. No obstante, el 88% de las adopciones que se registran en España son de niños de origen extranjero. Así, en 2005 hubo 5.423 adopciones internacionales frente a 691 nacionales, según datos oficiales.
En relación con los hijos nacidos por cualquiera de las técnicas de reproducción asistida, "sólo excepcionalmente" podrá revelarse la identidad de los donantes cuando sea "indispensable". Dos son los casos obligatorios: garantizar la salud del niño y atender un requerimiento judicial. En todo caso, la difusión de estos datos sobre los orígenes tendrá "carácter restringido" y no implicará "en ningún caso" publicidad de la identidad de los donantes de gametos (células sexuales) y preembriones, tal y como establece la Ley sobre Técnicas de Reproducción Humana Asistida, aprobada en mayo de 2006.