El Poniente registra sólo ocho acogimientos familiares durante 2007 y principios de año

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EL EJIDO
La Cruz Roja es la encargada de evaluar a las personas interesadas en hacerse cargo de un menor En la provincia se han dado 48 casos
03.03.08 -
M. J. PEDROSA
La cifra de acogimientos familiares en la comarca del Poniente almeriense durante el año pasado y lo que llevamos de éste es tan sólo de ocho, según datos facilitados por la Junta de Andalucía. De estos ocho, siete de ellos corresponden a acogimientos familiares permanentes en familia extensa, es decir, que los menores han sido acogidos por miembros de su familia, como tíos o abuelos, durante un periodo de tiempo indefinido y sin pretensión de adopción, sino simplemente mientras los padres cambian sus circunstancias personales que les impidieron hacerse cargo de sus hijos.
Pero además, existe otro acogimiento que sí que es preadoptivo, o lo que es lo mismo, que el menor y la familia están en un periodo de prueba para comprobar si la adopción es definitiva o no.
Estos datos tan bajos coinciden con los totales de la comarca, que engloba los municipios de El Ejido, Roquetas de Mar, Vícar, La Mojonera, Berja, Dalías y Adra. Y es que en la actualidad, existen en la zona un total de 34 acogimientos familiares, de los cuales 32 son permanentes -31 en familia extensa y uno en un grupo familiar diferente al del menor-. También se ha dado el caso de una acogida simple en familia extensa, que significa que el menor está con miembros de su familia por un período transitorio hasta que se produzca la reunificación familiar.

Almería
Con respecto a las cifras a nivel provincial tampoco son muy elevadas. De hecho, según los datos de la Delegación de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, en 2007 y durante los primeros meses del presente año, tan sólo se han constituido un total de 48 acogimientos familiares, 21 de ellos son permanentes en familia extensa, 4 son simples en familia extensa, 6 permanentes en familia ajena y 17 preadoptivos.
Por otro parte, el número de acogidas de menores vigente en la actualidad en toda la provincia de Almería es de 138. Si se desglosa esta cantidad atendiendo a las diferentes tipologías de acogimientos, destacan los casos permanentes en familia extensa, con un total de 70, seguidos de los preadoptivos, con 45. En tercer lugar, se encuentran los recibimientos de menores dentro de familias ajenas, con carácter de permanencia, de los que se han dado 14 casos. Finalmente, están los acogimientos simples en familia extensa, con 8, y los simples en ajena, del que tan sólo existe uno.
A pesar de estas cantidades, el delegado de Igualdad y Bienestar Social, Luis López considera que no son especialmente relevantes, y que el hecho de que Almería sea de las provincias andaluzas con menor número de acogimiento no es significativo, puesto que «el próximo año puede ser al revés, depende del número de casos y de la voluntad de las familias que se ofrecen».

Convenio
Por otro lado, el delegado explicó que la Junta de Andalucía firmó un convenio con la Cruz Roja, mediante el cual la organización se encarga de evaluar a las familias que deseen acoger a un menor. A través de este convenio, los técnicos de Cruz Roja entrevistan a las familias interesadas y deciden si son idóneas o no. Una vez realizado este trámite se inscriben en una base de datos, de manera que «cuando se necesite una familia, se escoja la que se adecue mejor al perfil del menor», señaló López.No obstante, a pesar de la existencia de esta base de datos, el delegado comentó que «cuando nos llega un niño lo primero que hacemos es buscar dentro de la familia extensa alguien que los acoja porque entendemos que es lo ideal».
En estos casos, sucede a menudo que la situación económica de la familia no es muy buena por lo que la Junta de Andalucía remunera a la familia. Sin embargo, en el caso de que se encargue del menor un grupo familiar distinto al propio no se retribuye de ninguna manera, puesto que «se entiende que se trata de un acto de solidaridad». Y es que un perfil muy habitual en estas situaciones, aunque no el único, es el de una familia con una «economía mala». En cualquier caso, el delegado apuntó que es sumamente importante que «no se rompa el lazo familiar entre el menor y los padres, aunque el niño viva con una familia completamente distinta». Además, Luis López aseguró que desde Delegación se hace todo lo posible para que el menor viva con un grupo familiar, puesto que «este es el ámbito que necesita cualquier persona, y no un internado».