Redibujar la vida del menor

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MENORES

La 'Casa de Bebés' que gestiona la Delegación de Bienestar Social ha atendido a 37 niños desde su apertura hace año y medio • Cada historia es un drama porque los protagonistas son menores maltratados, desatendidos
PILAR MUÑOZ
La adopción y la acogida son dos medidas distintas de atención a los niños en situación de desamparo y, por tanto, hay que diferenciar entre aquellos que se pueden adoptar y los que sólo tienen la posibilidad de ser acogidos durante un tiempo. Sin embargo, en ambos casos, se trata de redibujar la vida de estos menores. La Delegación provincial de Bienestar Social es la encargada de tutelar a estos niños en pisos o viviendas unifamiliares hasta que se solucionan los problemas sociales o familiares que les han llevado a esa situación. Una de las doce casas que tiene Bienestar Social para acoger a los menores desamparados está dedicada a aquellos que tienen entre cero a seis años. La vivienda se abrió el 16 de octubre de 2006 y desde entonces ha acogido a 37 niños, siendo raro el día que queda libre una de las ocho plazas de que dispone. El pasado año atendió a 20 menores de entre cero y once años, aunque es hasta los seis, porque no quisieron separar a unos hermanos. A primeros de 2007 llegaron a esta vivienda tres pequeños que malvivían en un garaje de Ciudad Real, ya que el padre se había quedado en la calle y lo único que encontró fue una cochera. El mayor, de unos 11 años, se ocupaba de los otros dos, uno casi un bebé, mientras el padre estaba en Madrid trabajando en la construcción. Éste fue uno de los casos que más ha impactado a la delegada de Bienestar Social, Prado Pérez de Madrid, y al personal que atiende la casa, aunque aseguran que cada historia es un drama porque los protagonistas son niños, algunos de días, que en su mayoría están en situación riesgo por malos tratos, desatención o abusos. Otros son hijos de drogopendientes, discapacitados, presos o personas que carecen de recursos, muchos inmigrantes.
Lo primero que hacen los responsables de este servicio cuando reciben un niño para tutelar es hacer una valoración física y psicológica del menor y un informe social, además de estudiar la medida más favorable para él, en el sentido de resolver su acogimiento familiar de consanguinidad o con familias ajenas. Respecto a la adopción, la directora de la 'Casa de Bebés', Isabel Pérez, explica que desde que está abierta se han dado dos casos de mujeres que habían decidido con anterioridad dar en adopción a sus hijos, hecho que se produjo días después de que nacieran, siguiéndose el protocolo establecido. Por otro lado, recalcan que en la mayoría de los casos la familia no sabe dónde están los niños, sobre todo si hay una orden de alejamiento.