La niña sigue bajo custodia de la Junta, pese a que un juez archivó un caso de supuesto maltrato
Noemí González / Jerez Actualizado 31.07.2008 - 05:01"Esto es una pesadilla. No me creo que esto me esté pasando a mí". Son las palabras de Salud García, una madre de Jerez que está viviendo el peor mes de julio de toda su vida. El pasado día 8 vio cómo perdía la custodia de su hija Salud, de dos años y medio, y desde entonces no ha cejado en su empeño por recuperarla. Ahora mismo se resigna a verla una hora a la semana en una fundación, Márgenes y Vínculos, que ha entregado la menor a una familia acogedora. "Aunque me digan que la niña está bien, yo sé que no lo está porque lo noto", señala la mujer.
La madre de la pequeña no imaginaba que llevar a su hija al hospital con un cuadro febril, vómitos y diarrea iba acarrear a la familia unas consecuencias tan graves. En la exploración pertinente, los médicos observaron una serie de hematomas en la espalda y en un ojo, relata la madre. Salud les contó que unos días antes la pequeña se había caído del sofá. También le observaron algunas alopecias o falta de pelo en la cabeza, algo de lo que estaba siendo tratada la menor con anterioridad, puesto que se le habían detectado hongos. El médico le había recomendado un champú como principal tratamiento desde finales de junio, aunque la caída de pelo no cesaba. De ahí que la madre insistiera en volver al hospital con ella. Fue entonces cuando saltaron las alarmas y se emitió un parte de lesiones por malos tratos, ya que asociaron que esa alopecia se debía directamente a tirones de pelo, algo que comenzó a investigarse. Ese mismo día, el Juzgado de Instrucción Número 2 de la ciudad dictó un auto en el que declaraba vigente una medida cautelar en la que la custodia de la menor recalaba en el Hospital del SAS, eso sí a disposición de la Delegación de Igualdad.
Salud García ha puesto el caso en manos de su abogado para recuperar lo antes posible la custodia de su hija. Su desesperación fue aún mayor cuando descubrió que la niña iba a ser entregada a una familia acogedora mientras duraba esa medida de cautela.
El pasado 16 de julio el Juzgado de Instrucción 1 de Jerez dictó un auto en el que declaraba el sobreseimiento provisional de las actuaciones y el archivo de la causa al considerar que "no aparece debidamente justificada la perpetración del delito" en cuestión, el de malos tratos.
Además, en ese auto se dejaba sin efecto la medida cautelar acordada por el del 8 de julio, aunque a día de hoy la menor no ha vuelto a su casa ni a jugar con su hermano. La Junta, según señala el abogado de esta familia jerezana, decidió seguir investigando el caso.
"No puedo estar en mi casa porque las paredes se me caen encima. Mi hija es un continuo murmullo, es muy cariñosa y con todo el mundo hace. Y ahora con este silencio..., es que no puedo estar aquí", dice Salud con las lágrimas a punto de aflorar. Su hijo mayor, de cuatro años, lo lleva aún peor.
La madre de la pequeña no imaginaba que llevar a su hija al hospital con un cuadro febril, vómitos y diarrea iba acarrear a la familia unas consecuencias tan graves. En la exploración pertinente, los médicos observaron una serie de hematomas en la espalda y en un ojo, relata la madre. Salud les contó que unos días antes la pequeña se había caído del sofá. También le observaron algunas alopecias o falta de pelo en la cabeza, algo de lo que estaba siendo tratada la menor con anterioridad, puesto que se le habían detectado hongos. El médico le había recomendado un champú como principal tratamiento desde finales de junio, aunque la caída de pelo no cesaba. De ahí que la madre insistiera en volver al hospital con ella. Fue entonces cuando saltaron las alarmas y se emitió un parte de lesiones por malos tratos, ya que asociaron que esa alopecia se debía directamente a tirones de pelo, algo que comenzó a investigarse. Ese mismo día, el Juzgado de Instrucción Número 2 de la ciudad dictó un auto en el que declaraba vigente una medida cautelar en la que la custodia de la menor recalaba en el Hospital del SAS, eso sí a disposición de la Delegación de Igualdad.
Salud García ha puesto el caso en manos de su abogado para recuperar lo antes posible la custodia de su hija. Su desesperación fue aún mayor cuando descubrió que la niña iba a ser entregada a una familia acogedora mientras duraba esa medida de cautela.
El pasado 16 de julio el Juzgado de Instrucción 1 de Jerez dictó un auto en el que declaraba el sobreseimiento provisional de las actuaciones y el archivo de la causa al considerar que "no aparece debidamente justificada la perpetración del delito" en cuestión, el de malos tratos.
Además, en ese auto se dejaba sin efecto la medida cautelar acordada por el del 8 de julio, aunque a día de hoy la menor no ha vuelto a su casa ni a jugar con su hermano. La Junta, según señala el abogado de esta familia jerezana, decidió seguir investigando el caso.
"No puedo estar en mi casa porque las paredes se me caen encima. Mi hija es un continuo murmullo, es muy cariñosa y con todo el mundo hace. Y ahora con este silencio..., es que no puedo estar aquí", dice Salud con las lágrimas a punto de aflorar. Su hijo mayor, de cuatro años, lo lleva aún peor.
1 Comment:
Creen que es justo lo que estan haciendo con esta madre?? La justicia ha sido demasiado rapida para juzgar, pero cuando todo se solucione y vuelva a estar con su madre, a ver si son iguales de rapidos para aplicarse la justicia los que han cometido el error.